¿Qué significa que un producto sea artesanal?
¿Es una estrategia de marketing o de verdad hay diferencias?
Lo cierto es que muchos productos llevan hoy el “sello” de ser artesanales, sin embargo, una forma de catalogarlo así o no, tiene que ver con el proceso de producción.
Hay lugares en donde se venden productos diversos y de apariencia apetecible pero que son traídos desde afuera (China principalmente) y son congelados por meses antes de ser consumidos. Esto conlleva un gran número de preservantes para lograr que el producto se mantenga fresco y por consiguiente la calidad jamás será igual a la de un producto recién fabricado.
¿Cuál es la ventaja? Sin duda un mejor precio, ya que al ser un producto almacenado por tanto tiempo, la cadena de producción es más eficiente y se realizan esas tareas en países con menor costo en mano de obra. A diferencia de la repostería artesanal local, que se hace a mucho menor escala y con un número limitado de personas en la producción.
Entonces a la hora de decidir en dónde invertir mi dinero y qué me dejará más satisfecho, no debemos olvidar considerar estos factores.
Comprar algo que deliberadamente es más caro pero que resulta de mejor calidad y por ende evito en muchas ocasiones posible indigestiones, sin olvidar el disfrute de comer un bocadillo o pastel fresco, recién horneado.
O disfrutar de algo igualmente rico, pero que no tiene la frescura de lo recién elaborado.
En Florence tenemos alternativas que además de ser económicas, son fabricadas con el esmero y amor de lo artesanal. Llevamos lo mejor a tu mesa y al precio de mercado justo que más te conviene.